CARTAS AL CIELO
3 de octubre 2024
Veníd de mi, todos los trabajados y cargados,
Y Yo os haré descansar.
Cuantas veces he escuchado esta palabra, es preciosa, es una palabra que atrae, una palabra que fácilmente atrapa, pero viene con un condicionante,
"Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mi que soy manso y humilde de corazón y hallaréis descanso para vuestras almas"
Es por eso que decimos que es difícil seguirte, Tate una vez más hacemos las cosas a nuestra manera, sembramos tomates, con la esperanza de recolectar aceitunas, para poder conseguir aceite, y miramos las plantas de tomates esperando que se haga un olivo, fuerte y robusto, pero comienzan a salir frutos rojos y nos sentimos decepcionados:
¿ donde está lo que prometiste? todo es falso, todo es mentira.
Queremos el fruto adecuado, sin la semilla de ese fruto, esperamos todo por arte de magia, sin esfuerzos.
"Me prometiste que en Ti podría descansar y cada día estoy más cansada"
Esas son palabras puestas en nuestra mente, no nos paramos a analizar el porqué no tenemos ese descanso.
El condicionante me dice:
"Aprended de mi que soy manso y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras almas"
Pero también me dice: "Porque mi yugo es fácil y ligera mi carga"
Y es que, mi Tate, creo que esa es la clave, el yugo que Tu pones, el yugo se lleva entre dos, se pone sobre el lomo, y siempre va en paralelo el uno con el otro, es por eso que Tu carga es ligera, porque Tú la llevas conmigo.
Puedo pensar que si me siento trabajada, si me siento cansada, en algo estoy fallando, algo no estoy haciendo correctamente pues Tu no eres mentiroso.
Analizando el texto, puedo ver que no siempre soy mansa y humilde de corazón, que puede más mi yo en distintas ocasiones, también que llevo cargas sobre mis hombros que no tengo que llevar, por todo lo cual, a veces me cuesta llevar la carga, siendo que seguirte no es difícil, solo requiere morir a mi misma cada día, solo requiere que esté dispuesta a hacer a los demás lo que me gustaría que me hicieran, solo requiere tomar mi cruz cada día y seguirte.
Tu distes una pautas muy claras y precisas, pero yo me pierdo en divagaciones tales como si tengo que morir de pie o tal vez sentada, si mi cruz es más grande o pequeña que la de mi hermano, que si tengo diez o veinte dones, quito mi vista de lo importante, de Ti, de morir a mi para que Tu vivas en mi, de seguir la verdad.
Necesito que mi alma abrace la pureza de Tu senda, necesito entender que la senda abierta por ti, no siendo la más atractiva, es la que me lleva a mi destino establecido.
Necesito amarte con amor del bueno, ese que viene del cielo.
Muy buenos días
Feliz jueves
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