CARTAS AL CIELO
20 de Junio 2024
Habían pasado más de cuarenta años desde que iniciaron su trayectoria, ya Moisés sabía que no entraría a la tierra prometida, podía parecer injusto pero Moisés tenía una comunicación cara a cara con El Señor de los espíritus, con El Varón de guerra y a mayor beneficio, mayor responsabilidad, de esta forma funciona el reino de los cielos, aún sabiendo esto Moisés bendijo al pueblo y lo hizo como un padre, yo se que se dice que unos padres quieren a sus hijos por igual pero la realidad es que los quieres de forma diferente, ni más, ni menos, de forma diferente, me explico: cuando pienso en mis hijos los veo y los bendigo pero las características, las formas, los temperamentos y sus caracteres son diferentes, por lo cual me gustan, los amos pero a cada uno de forma igual y única, cada uno de ellos son una herencia especial y única venida del cielo.
Moisés sabía que cada una de esas tribus de Israel eran especiales y únicas, cada una tenía sus características, por eso las bendijo de esa manera individual, como un padre que da las últimas instrucciones a sus hijos, aunque sabía que no entraría a esa tierra, a él le espera la presencia del Creador y el beneficio que traería a ese pueblo sería una huella imborrable.
La palabra habla de bendecir y nosotros tenemos que aprender de Moisés a bendecir dando igual las circunstancias.
Normalmente buscamos nuestros beneficios y si no los obtenemos ni siquiera nos molestamos en mirar a esas personas, sin darnos cuenta que en ese bendecir, en ese buscar el bien del prójimo está nuestra bendición y nuestro beneficio, pues son semillas que sembramos y en el Reino de los cielos funciona la ley de la siembra y la cosecha, depende de nuestra siembra de eso vamos a recibir.
Feliz jueves
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